MELINDRES

MELINDRES

¡Qué ganas de un buen dulce casero!. Con tanta ciclogénesis, temporales, galernas y lluvia sin parar, por lo menos nos damos una pequeña alegría.

A mi me encantan los melindres. Suelo comprarlos en una pequeña pastelería donde los hacen divinamente, pero me dije: ¿porqué no hacerlos yo?... ¡y qué sorpresa!, ¡salen riquísimos!. Os lo cuento:

INGREDIENTES:

3 huevos

3 cucharadas de aceite

3 cucharadas de azúcar 

1 copa de anís o esencia

1 cucharadita de levadura en polvo

Harina (la que admita)

PARA EL GLASEADO:

250 gr. azúcar (1 taza llena)

1 taza de las de café con agua

PREPARACIÓN:

Hacer un almíbar con la taza de azúcar y la taza de las de café de agua. Ponerlo a fuego lento y retirar cuando ya esté casi a punto de hebra.

Mezclar los huevos excepto una de las claras, que reservaremos para hacer luego el glaseado, el aceite, el azúcar, el anís (opcional), y la levadura. Añadir la harina poco a poco hasta formar una masa que podamos manejar.

Formar pequeñas bolitas y freírlas en abundante aceite. Retirar y colocar sobre papel absorvente. Dejar enfriar.

Con la clara de huevo que hemos reservado hacer merengue y cuando esté listo ir añadiendo poco a poco el almíbar. Seguir batiendo hasta que se incorpore todo perfectamente.

Bañar los melindres en este glaseado y colocarlos sobre una fuente. Dejar enfriar y secar para que endurezca el baño.

¡Listos!